Llamamos endeudamiento a la deuda total de los créditos que se utilicen. Dicho de una manera más sencilla, es el conjunto de obligaciones de pago que una persona o una empresa tenga con otra persona o compañía.
A continuación te contamos lo más importante sobre el ratio de endeudamiento. ¡Acompáñanos!
¿Qué es el ratio de endeudamiento?
Este ratio financiero se encarga de medir la relación que existen entre el importe de los fondos propios de una empresa o profesional, en relación a las deudas que mantiene tanto en el largo como en el corto plazo.
Es importante saber que este ratio indica cómo está de apalancada la compañía en los que a financiación ajena se refiere, entre la financiación a largo plazo y a corto plazo. Es recomendable que la mayor parte de la financiación sea a largo plazo, para que el pasivo no corriente sea igual o equivalente al patrimonio neto de la empresa o persona, y se sitúe en 1.
Por otro lado, el pasivo corriente deberá estar por debajo del 50 % del patrimonio neto, de forma que el ratio de endeudamiento a corto plazo esté como mucho debajo del 0,5. Todo ello en fórmula financiera se calcula: el ratio de endeudamiento a largo plazo dividiendo el pasivo no corriente entre el patrimonio neto; y el ratio de endeudamiento a corto plazo dividiendo el pasivo corriente entre el patrimonio neto.
No es recomendable que una empresa o un profesional autónomo estén muy endeudados. Es un riesgo, ya que puede repercutir negativamente en el funcionamiento de su actividad, además de no poder hacer frente a sus pagos, lo que, a su vez, traerá consigo problemas con clientes o proveedores, que pueden entorpecer relaciones entre ellos, crear mala imagen de cara al exterior, etc. Por tanto, el endeudamiento siempre debe estar medido y controlado.
Gracias a las nuevas vías de financiación también es más sencillo para las empresas y autónomos estar al día en sus cuentas. Instrumentos financieros como el confirming son muy recomendables para que las empresas puedan abonar sus pagos al día, y evitar el riesgo de crear una mala imagen de empresa, o hacer peligrar sus relaciones con clientes y/o proveedores.
Fórmula del ratio de endeudamiento
La fórmula explícita para calcularlo sería dividiendo la deuda total entre los capitales propios. Los capitales propios es el patrimonio que la persona o empresa tenga, y la deuda total es la suma de lo que se llama el pasivo corriente y el no corriente.
Interpretación del ratio de endeudamiento
Determinar el ratio de endeudamiento de una empresa es fundamental para evaluar su nivel de riesgo financiero.
Una empresa con bajo riesgo financiero tiene una dependencia reducida de fondos prestados, lo que la hace más estable. Estas empresas suelen tener un índice de endeudamiento por debajo del 0,5, lo que indica que la mayoría de sus activos son propiedad de la empresa.
En contraste, una empresa con alto riesgo financiero ha asumido una gran cantidad de deuda. Un índice de endeudamiento por encima del 0,5 significa que la mayoría de sus activos se financian con préstamos.
En algunos casos, un alto índice de endeudamiento puede ser preocupante, ya que podría poner en peligro la estabilidad financiera de la empresa si sus acreedores solicitaran el reembolso de sus préstamos repentinamente. Por esta razón, se suele preferir un ratio de endeudamiento más bajo.
Para encontrar un ratio de endeudamiento adecuado, las empresas deben compararse con el promedio de su industria o con sus competidores directos.
En conclusión, el ratio de endeudamiento de una empresa proporciona información valiosa sobre su financiación y ayuda a definir estrategias para prevenir posibles problemas financieros relacionados con la deuda.
Capacidad de endeudamiento
Una persona o empresa pueden endeudarse hasta cierto límite, para no caer en una quiebra. Este límite que es lo que se conoce como capacidad de endeudamiento. Esta capacidad es la cantidad máxima que una persona, sea física o jurídica, puede tomar prestado, sin que el prestamista tenga ningún riesgo de no obtener devolución. Para determinar esta capacidad se debe tener en cuenta las opciones de generar rentas futuras, en función de las circunstancias de hoy en día, el patrimonio, la opción de avalistas, etc. Para realizar este cálculo se puede acudir a una entidad financiera, aunque también hay algunas calculadoras generales por Internet, en las que introduciendo los datos solicitados se informa sobre el porcentaje de endeudamiento que se tiene, así como su capacidad. Los datos que suelen solicitar son los ingresos mensuales desglosados, es decir, con pagas extra, retenciones, etc. hasta el sueldo neto y todos los gastos mensuales, desde el hogar, los suministros, los seguros, ocio, etc. al final se obtiene la carga financiera, la capacidad de ahorro y la relación entre ingresos y gastos. De esta manera, el individuo o la empresa puede saber hasta dónde puede endeudarse sin peligro.