Tanto en las empresas B2B como en las B2C, en las pequeñas y en las grandes, desde que se inicia el proceso de producción de un bien o servicio hasta que llega al receptor final pasa por una serie de personas o empresas que contribuyen a darles valor, son los intermediarios y hoy vamos a hablar de la importancia que tienen.
Qué hacen los intermediarios
Los intermediarios no son siempre vistos con buenos ojos, ya que muchas veces se considera que solo son un escalafón más en el proceso productivo que no hace sino encarecer los productos o servicios cuando llegan al cliente final. Sin embargo, los intermediarios también aportan una serie de factores positivos que son los que le dan su posición privilegiada y necesaria.
Muchas veces, los intermediarios ayudan a reducir los costes a los negocios, ya que hay determinadas tareas que las empresas productoras no pueden realizar por cuestión de costes y recursos, como son la distribución o la venta.
Además, los intermediarios también pueden aportar valor a los productos o servicios, tanto en el aspecto más productivo como en el puramente comercial. Pensemos que un pequeño comercio que vende artículos de sus proveedores es el encargado de resaltar las bondades y características de ese producto de cara al público.
Tipos de intermediarios
De entre todos los tipos de intermediarios que podemos encontrar, hemos decidido hacer una clasificación entre dos grandes grupos: los que participan y los que no en el proceso productivo.
Por un lado, en el primer grupo podríamos encontrar personas físicas o jurídicas que realicen tareas para la producción de bienes intermedios y que ayudan a completar lo que llegará al cliente final, es aquí donde darían ese valor añadido desde el punto de vista productivo del que hablábamos antes.
Por otro lado, encontraríamos el grupo que más se acoge a la definición de intermediario y que son el nexo de unión entre productores y clientes. En este grupo es donde encontraríamos a los minoristas, mayoristas, distribuidores, almacenistas, etc.
Con todo ello, no quiere decir que no haya determinados procesos en los que se pueda prescindir de intermediarios, pero sí que es cierto que este tipo de actividades tan directas son cada vez menos comunes en las economías globalizadas.